domingo, 24 de febrero de 2019

EL DEBATE QUE NO FUE DEBATE

"Hace cuatro años dije que no soy un hombre perfecto y que no sería un presidente perfecto. Pero prometí que lucharía todos los días en nombre del pueblo estadounidense y la clase media, y he mantenido dicha promesa" / Barack Obama, durante el debate presidencial del 2012.


Este lunes se cumplen 5 días del Primer Debate Presidencial, organizado por la Universidad de Panamá, y son varias las personas que me han preguntado: Jorge Luis ¿para ti quién ganó el debate?, mi respuesta ha sido la misma: Nadie, aunque ciertamente hubo alguien que destacó en medio de los elementos desacertados que repetimos elección tras elección.




Lo que debo decir es que este "Gran Debate" ni quita ni pone rey; es así, por la misma estructura que nos dejó entrever a 7 personas acartonadas; nerviosos e intentando no equivocarse y cumplir con su parte en esta obra de teatro que nos dejó a deber a todos.
Si debo hablar de un gran ganador tengo que confesarlo no hubo uno sino dos. El primero fue el aburrimiento; el segundo e indiscutible triunfador fue el sueño para muchos. Es decir, quienes lo plantearon hicieron un buen esfuerzo por producir el somnífero perfecto para que muchos durmieran como angelitos.

Los más berrinchosos, entre los que me anoto, lo seguimos pese a ser en momentos una tortura a las neuronas y a la impaciencia por hallar algo interesante.

De ello no culpo a ninguno de los 7 candidat@s; a sus asesores un tanto, pero al genio que esculpió el libreto hay que darle una estatuilla por todos los negativos que tuvo este formato.

Días antes varios expertos con los que hablé tenían su aprehensión de lo que iba a darse, muy probable por los antecedentes de otras elecciones, como lo escribí antes; y por la ausencia de sorpresa en que se han convertido estos encuentros maratónicos y ausentes de “momentum” como lo amerita una producción como esta.

La RAE define Debate como la acción de debatir y encierra el término como un hecho de controversia, lucha y combate. Acciones que no vimos en ningún instante de las dos horas y medias. 

Estoy convencido que muchos, entre los que me sumo, no queríamos un patio limoso; ni sacadera de trapos personales ni demagogia barata. 

El concepto de tener figuras diferentes, con conceptos contrapuestos era eso cuestionar al contrario lo planteado y el cómo desde su perspectiva se debe hacer para iniciar una solución a un tema tan complejo como la Educación, tema que coincido con un amigo al hombre común; ése que sale cada día a pelear por el afrecho, no lo cautiva.

Perdimos una oportunidad de oro de escuchar argumentos, basados en un plan no inventado para pasar la prueba, de cada uno de los 7 candidatos y que nos hicieran mirarlos y hasta sorprendernos.

Con ello no lo juzgo; ciertamente hubo figuras que si se hubieran quedado en la casa no hubiera pasado nada; otros que creyeron estar en el país de los tontos y desmemoriados; lo más chocante para mí fue ver a alguien atribuirse la verdad, cuando la verdad más pura es aquella compartida; o decirnos los demás son corruptos y yo soy el salvador con un verbo ausente de base y panfletario.

Si bien hay quienes quieren escuchar: tú eres, te robaste o con el dinero de esto voy a hacer aquello; cero convencimiento para quienes saben que son palabras tiradas como dardos al vacío.

En fin, el segundo “debate” lo organiza la Cámara de Comercio e Industrias de Panamá y esperemos puedan articular una mejor presentación, saber desde el debate de ideas quiénes tienen las mejores propuestas para atraer la inversión, tanto interna como externa, pero sobre todo la generación de nuevos modelos de empleos para una población productiva que está en su casa con las manos en su cabeza o porque perdió su fuente de trabajo o no halla espacio para laborar.



La inversión que nos genera investigar

" La verdad se robustece con la investigación y la dilación; la falsedad, con el apresuramiento y la incertidumbre.” Tácito  C reo en l...