domingo, 29 de marzo de 2020

EL COVID-19 ES EL LLAMADO A CUIDAR EL PLANETA

"Nos estamos enfrentando a la sexta extinción masiva 
y el ritmo de extinción es 10.000 veces más rápido de lo normal"
 Greta Thunberg

Me declaró creyente de la cultura verde, de la conservación de nuestra tierra; como nuestros antepasados, y por una razón simple:  Nosotros dejaremos este espacio y quienes vengan recibirán una tierra cansada y con recursos agotados; entonces la guerra dejará de ser por la tierra,  será por la sobrevivencia de esos recursos que no son infinitos.
Hace años, tuve la oportunidad de leer un excelente trabajo científico, publicado por la revista Newsweek (la que debe estar en algún rincón), y en ella un científico intentaba explicar, con una hipótesis, cómo llegó el VIH a los humanos; y su explicación se basaba en la convivencia de humanos con un determinado mono.
Hoy, casi 20 años después, me tropiezo con este artículo publicado por el diario El País, de la periodista Patricia Peiró: https://elpais.com/elpais/2020/03/23/planeta_futuro/1584966075_762387.html y en pocas palabras es lo mismo: investigaciones demuestran que hay cerca de mil 700 virus y otros que desconocemos aún;  el coronavirus es uno de ellos. Al final, los resultados son los mismos; si continuamos con las prácticas de mezclar, en un mismo punto, animales diversos los resultados pueden ser catastróficos.
foto tomada de El País 

“La deforestación está directamente relacionada
con el 31% de los brotes—. Si miramos estos detonantes”

Esta posición tiene lógica y hasta evidencias tangibles, en este momento en que somos asediados por el COVID-19; sucede que en China, ante la disminución de autos y viajes mostró un cambio gradual en el nivel de contaminación ambiental.
Italia, la nación que tristemente por la falta de atender las alertas tiene la mayor cantidad de fallecidos por este virus, hoy, varios reportes informativos indican que los canales de Venecia se han limpiado y se han observado hasta peces.
Realidad de Venecia hoy
Todo esto nos debe llevar a pensar y evaluar ¿qué hacemos mal?;  son pocas voces, sobre todo las científicas y los ambientalistas, no snobistas (ellos surgen cuando los demás aprietan el botón “ON”)  nos revelan, no leyendo oráculos, sino bajo premisas de cifras e investigaciones,  que nuestra tierra la hemos flagelado y el COVID-19 parece ser sólo la pequeña muestra del iceberg al que nos enfrentamos de no parar un desarrollo inhumano.


¿Estamos a tiempo de hacer un cambio? ¿puede haber un desarrollo sin agotar nuestros recursos naturales?; esas y otras preguntas tiene un contundente; genera más concienciación, por supuesto, y nuestro país es un ejemplo de ese agotamiento. 
El conocido Tapón de Darién, nuestros ríos y recientemente parte de nuestra área revertida, entre muchas otras, han sido víctimas de poner el urbanismo descontrolado por delante.
El COVID-19 nos ha costado vidas y nos cobrará aún más; desalentará la economía; lo que como aprendizaje nos deja son variadas lecciones y una de ellas es que, como los seres humanos, cuando nos intoxicamos, la Madre Tierra, decidió expulsar parte de lo que ha recibido y sanarse; no esperemos que su limpieza equilibrada sea mayor.

domingo, 22 de marzo de 2020

ABRAZOS Y CONVERSACIONES EN TIEMPOS DEL COVID-19

A medida que el Coronavirus avanza en los países una medida es, hasta ahora el remedio, para mitigarlo; se trata del aislamiento de las personas, sobre todo los adultos mayores. Quedarse en Casa no es un hashtag más; es la marcha de retirada para evitar la propagación de este virus.
El aislamiento es la mayor medida contra el coronavirus
Hoy,  el avance de la medicina junto a la tecnología, ha permitido un conocimiento más rápido del COVID-19 (nombre del coronavirus), sin embargo, por más noticias que alientan a la humanidad de fármacos, vacunas y remedios, nada está demostrado y pudiera demorar, al menos un año, una confirmación de su efectividad.
En pleno siglo XXI, cuando muchos se creían infalibles y lo tenían todo controlado, un virus que se esparce a través del contacto humano nos ha reducido y nos ha obligado a encuartelarnos para luchar contra él.
El COVID-19, familia de un grupo de virus transmitido por los animales en su mayoría, nos ha obligado a hacer cambios en nuestros hábitos diarios; especialmente a los latinos, dados a los abrazos, besos, apretones de manos y toda muestra cálida de cariño.
En una lectura hecha, los sociólogos han definido este fenómeno como la microsociología de los saludos, eso quiere decir que lo cotidiano, el diario vivir al que estábamos acostumbrados como son: Saludos, abrazos, besos y demás, ahora no son positivas y hasta nos puede transmitir el virus. Debemos estar a un metro distancia y, como escuché, al doctor, Elmer Huerta, en Radio Panamá, “aislarse” y “evitar conversar” es una solución para impedir los contagios.

Frente a ello que ha sucedido, en países como Italia (donde la cifras de muertos va por los 5 mil), y los contagiados suman más de los 60 mil); España ( las muertes suman cerca de las mil 730 personas y los contagiados pudieran ser 30 mil), ante la falta de atención y el llamado de las autoridades, se han visto obligados a cerrar las puertas de sus casas y no salir.  La cuarentena ahora es obligada.
Los adultos mayores en Italia son los principales víctimas
Este es un virus nos ha aislado socialmente y nos ha obligado a pensar y revaluar nuestras vidas; estar en cuarentena ha sido lo más duro vivido para personas que quedaron solas. 
Es Tiempo para que la familia esté junta; para valorar nuestro hogar; reaprender lo básico.
Hoy, aquello “pasado de moda”; lo que la tecnología, a través de las redes sociales, nos había arrebatado resulta importante: Volver a la sala el televisor (puede ser para ver canales abiertos, cables o formatos nuevos en streaming); el dinero deja de tener el valor de que todo se compra; al final, el coronavirus no discrimina y a todos nos puede dar; algo que, en lo personal, me impresiona hemos girado el rostro para escuchar.
Sólo en España la gripe española cobró 260 mil personas
Cuando pase el Covid-19, como lo hizo la epidemia de la Gripe Española, la Peste Negra, de seguro nuestra conducta (tal vez no generalizada) habrá cambiado; incluso, nuestro consumo variará y antes de dar un abrazo frívolo optaremos por un gesto sencillo con un valor real.
Ni a los mejores escritores de cine ni de novelas se hubieran imaginado un mundo con sus fronteras cerradas; con su economía contra las cuerdas; con calles silenciadas y la preocupación de cómo volveremos a la normalidad.

domingo, 15 de marzo de 2020

LA REBELIÓN DE LOS IDIOTAS

El coronavirus lleva su nombre por las coronas que tiene el virus


Lo primero, pido disculpa por este título, porque para todos es un término duro y hasta despectivo; más no es así. Idiota proviene del griego "idiotes" y se refería al hombre que no "se ocupaba de los asuntos públicos, sino sólo de sus interes particulares".

Dicho esto, hace 90 años, el filósofo español José Ortega y Gasset, escribió su libro que lo hizo trascender: La Rebelión de las Masas, coincidentalmente Ortega y Gasset se refería al hombre pequeño (de pensamiento) y que se unía a un colectivo gregario y actuaba en función de una tribu, que no piensa si es o no lo que necesita un sociedad, un país o un continente.
Hoy, el mundo está ante la aparición del conocido “Coronavirus” o Covid-19, familia de unos siete coronavirus, dos de los cuales ya han generado contagiados y muertes, en el pasado; la diferencia está en que hemos sido presa, en medio del combate por parte de los gobiernos, de quienes usan las redes de forma irresponsable y generando el caos con informaciones falsas y que no ayudan en nada. Se replican hasta fórmulas mágicas para curarlo. Eso no es serio ni humano.
En el caso nuestro, el virus, hizo su entrada el pasado 9 de Marzo, dar cifras en el momento de escribir este blog no vale, porque las cifras deben ir en crecimiento, tal como se ha comportado en otros países; desde ese mismo momento inició todo tipo de datos, unos más exagerados que el otro y la reacción vino en cadena.
Los supermercados se abarrotaron, las farmacias tuvieron el mismo comportamiento y los artículos fueron en escalada ascendente por parte de empresarios inescrupulosos, inescrupulosos, no hay otra palabra, que aprovechan lo mínimo para llenar sus cuentas de ahorros sin medir nada; ni siquiera su propia seguridad.
Los comercios de comida y farmacias fueron inundadas
Los casos, como era predecible por el comportamiento del virus, han empezado a elevarse y nuestro servicio de salud ha tomado las medidas similares a otros países: Suspensión de clases a nivel nacional, reducción de los colaboradores, en el sector del Estado, sugerencia hecha igual para la empresa privada.
Las medidas sanitarias han ido en aumento; no más de 100 personas en un mismo sitio; la suspensión de actividades recreativas, religiosas y en fin, todo lo que inpida que el virus, con los contagiados locales se multiplique como ha sucedido en naciones como Italia o España. Recordemos que el virus necesita menos de un metro para ingresar en nuestro cuerpo.

Todo esto suena bien; donde la puerca tuerce el rabo es que algunos inmaduros, o masas, o la rebelión de los necios, como los llama Umberto Eco, han tomado la decisión de moverse hacia el interior; de seguir como si aquí no pasara nada; por lo que las autoridades van a tener que tomar el toro por los cachos.
En redes y whatsapp aunque las informaciones falsas (fake news) han disminuido persisten los “necios”, por no decir idiotas, sin medir que su propia familia pudiese ser presa del coronavirus.  Incluso, existen periodistas con preguntas, ante el Informe diario de los casos por parte del MINSA, que preguntan como buscando que les digan hay 100 muertos; 500 contagiados.
Esto es serio y, hoy, el Periodismo debe crecerse y dejar de manipular como político electorero; ya habrá tiempo para señalar; pero, en verdad, este no es el momento. Hoy, si no actuamos juntos, si no asumimos, nos guste o no, las medidas del gobierno, no nos irá bien. Italia y España son espejos donde no nos queremos ver; hagamos como Corea del Sur que asumió un liderazgo y mitigó el avance del coronavirus.
Lo importante es que como comunicadores reflexionemos que este es un tema de Seguridad Nacional y el rejuego de títulos tendenciosos no son positivos.

La inversión que nos genera investigar

" La verdad se robustece con la investigación y la dilación; la falsedad, con el apresuramiento y la incertidumbre.” Tácito  C reo en l...