martes, 19 de mayo de 2020

INICIO A LA NUEVA NORMALIDAD POST COVID-19

Toda la semana anterior y la que transcurre he reflexionado sobre ¿qué significa el inicio a la nueva normalidad en materia económica?; cuando lo hago analizo el inicio es algo nuevo; si retorno a mi anterior fuente de producción nada será igual; el otro elemento es si la empresa no aguantó tanto tiempo ¿a dónde retornamos?.
Soy un hombre que le gusta escuchar; en mi profesión esto es una norma para repreguntar; en este caso lo hago para recoger las mejores ideas y así tener un concepto de cómo asimilar la nueva normalidad a la que nos exponemos.
Antes de la aparición del COVID-19 nuestro crecimiento era lento, pese a los dínamos ejecutados por el gobierno nacional; con dos meses de paralización nuestros ingresos están "jodidos"; con empresas, pymes e industrias, con o sin chimeneas detenidas ,(servicios en general), el panorama no pinta muy bien.
Empresario Severo Sousa
Con una desocupación heredada de la administración anterior, cerca del 5%, de acuerdo a expertos y empresarios como Severo Sousa este dígito puede multiplicarse y quedar hasta en un 20%: Un número nunca antes visto en nuestra historia y que si sabemos hacerlo bien podemos frenarlo.
Parto que somos un país privilegiado, tenemos dos océanos; un clima favorable donde solo hay dos estaciones y la lluviosa dura casi 9 meses; por nuestra formación de istmo no somos blanco de huracanes; a esto le agrego una nación joven y una posición que nos pone, desde la historia más antigua, en el mejor sitio para ser la envidia del resto de las naciones.
Como le escuché a un empresario “tenemos todo y todos nos miran”, porque estamos como el corredor con el mejor vestido, las mejores zapatillas y hasta con las apuestas a favor (cosa que muchos no ven); entonces ¿qué nos falta?: Nos falta que nos la creamos y dejemos de tirarnos pullas y dejemos de actuar como los cangrejos latinoamericanos que antes de ayudarse para escapar se empujan hacia más abajo.
El complejo nos mata, la desigualdad social y educativa (patrocinada por un grupo) nos ha vuelto discriminadores y no reconocemos que hay pobres con capacidades y empresarios honestos.
Contamos con una posición estratégica para decirle al mundo: Dígame ¿qué no tenemos para ofrecerle?, en cambio, sucede todo lo contrario. El Canal de Panamá Ampliado se ha quedado en la vía solamente.
Tanto hablamos del hub logístico, esto último tan abstracto como la carrera misma; antes de restar oportunidades debemos sumarlas; nuestros puertos deben ser más y abandonar los intereses del Grupo A o B; ¿hay o necesidad de tener personal preparado para reparar naves y brindarles todo tipo de servicio que necesite?; ¿podemos instalar o no grandes bodegas desde Panamá para el resto del Continente? ¿tenemos capacidad o no de brindar servicios logísticos o de mantenimiento a todo lo que se mueva por nuestros mares?.
Esa pregunta no la hago para mi yo interno; de seguro usted puede tener las respuestas si vemos más allá de los árboles.
Una sugerencia es que dejemos de buscar lo obvio; he escuchado mucho sobre los E-Commerce (no digo que no es algo que debemos aplicar), pero es más de lo mismo que muchos hacen y tienen desde hace tiempo.
Entonces, debemos buscar las fórmulas que se acoplen a nuestra situación y ventajas de mercado; un empresario local, Guilermo Saint-Malo, lo escuché, en Radio Panamá, decir que ahora con la pandemia el mundo descubrió que no se pueden poner todos los huevos tecnológicos y logísticas en China; eso lo pone a sugerir Panamá. Un concepto brillante.
Hay ideas como crear una aduana latinoamericana para movilizar mercancía con costos mas competitivos; convertirnos, con esta crisis, en un sitio para calar cruceros y yates, lo que va a generar una cadena de beneficiados tanto en comida, bebidas, atención de salud y un sinnúmero de cosas.
¿Dónde está la llave para esto? poner gente responsable con la agenda en la mesa y con la capacidad de abrirse a las propuestas sin mirar el que hay para mí.  No soy ingenuo, pero si nos hundimos lo haremos todos.  Les dejo un pensamiento que lo digo constantemente: No veas la pelota donde está la jugada, sino dónde va a estar próximamente y a tal punto que puedas golear.

viernes, 8 de mayo de 2020

CUANDO EL CORONAVIRUS ATACA NUESTRA MENTE ¿CÓMO ACTUAMOS?

Hemos hablado, en otras entregas, del impacto del Coronavirus en nuestro sistemas sanitario; en nuestra economía, la que es una consecuencia de la cuarentena; ahora deseo hablarles de un tema que a todos nos debe preocupar y es nuestra salud mental.
He hablado con especialistas dedicados a la Salud Mental; una psiquiatra, una coach de yoga y una experta en autismo, porque la población con algún tipo de discapacidad ha sido impactada con este aislamiento social que vivimos.
Antes de la aparición de este patógeno, en el mundo, se establecía que la depresión, ansiedad, el estrés y otros procesos complejos de nuestro desarrollo mental generaban en el mundo una de las mayores razones de la no asistencia a los trabajos.
Cerca de 27 millones de personas son afectadas con algunas de estas condiciones médicas, en cuanto a su salud mental, y si hablamos de cifras se calcula que éstas generan millones de dólares en pérdidas y lo más triste, cada año, un millón de personas se suicidan en el mundo.
Sumado a esto aparece el Covid-19, un virus, que altera nuestro estado anímico; el mismo genera el miedo a lo incierto, a la muerte; los seres humanos, en general, somos bio-sociales y estar cuarentena nos genera todo tipo de emociones encontradas y la soledad deprime a quienes no están acostumbrado a ello.
El COVID-19 nos ha quitado la libertad de movilidad y eso para la mayoría de las personas asfixia, los inquieta, pero, algo que no podemos hacer es “agarrar el sartén por el mango cuando está caliente”, advertía la Doctora Juana Herrera, Psiquiatra y Directora del Instituto de Salud Mental de Panamá.
¿Qué nos aterra y cuáles son las alternativas
para mejorar nuestro estado de ánimo?
 A todos nos da miedo contagiarnos; como buenos occidentales no aprendemos a asimilar la muerte y sobre todo no una muerte cualquiera; tantos testimonios hemos escuchado que nos infringe mayor temor.
En lo personal, leí del Coronavirus desde Diciembre del 2019 y, como Periodista, trato de leer todo material científico, pero, en el camino paré, porque como dice el dicho: “hasta que el niño es llorón y lo pellizcan”. Sufro insomnio, desde mi niñez, y descubrí un día que mi angustia aparecía como a las 3:00 a.m.; no sólo pensaba en los míos, sino en mí mismo y el sueño se me bloqueaba.
A partir de entonces intento mantenerme informado, pero no saturado; esa es una línea de acción que si usted se encuentra igual debe tomar.
Lo otro, atienda las redes sociales con responsabilidad y no se deje manipular ni llevar por la gente que reproduce materiales alarmantes sobre curas brujas; ni que me lo contó el hermano de mi tío y se lo dijo a un compañero de trabajo.
Haga ejercicio cada día de ser posible; relájese; escuche música o vea programas que le agraden; lea, leer no da coronavirus, por el contrario, nos alimenta el cerebro y el alma.
Conversé con su familia, no los olvide, trate de aprovechar positivamente el tiempo y genere esos vínculos perdidos o a los que le dedicaba “calidad de tiempo” (eso no existe). 
Los adultos mayores ni las personas con discapacidad no son, como dice el Papa Franscisco,  sociedad del descarte.
Haga higiene del sueño; es importante descansar para evitar ser presa de los pensamientos negativos; haga ejercicios de respiración y armonice su mente.
La salud mental no sólo es el tema de cómo funciona nuestro cerebro, que como sabemos cuando estamos tristes generamos más azúcar y menos serotonina; es un tema integral, es decir, espiritual. Por ello, debemos entablar un diálogo interno con esa fuerza que consideramos superior a nosotros y colocar las piezas internas en orden para enfrentar esta prueba.

martes, 21 de abril de 2020

ECONOMÍA II: TIEMPO DE RETIRADA, REAGRUPARNOS Y VOLVER A EMPEZAR

Esto

es continuación de mi escrito, anterior titulado, Economía: Lo que viene después del COVID-19, porque luego del aletazo que tiene este patógeno por sí solo; el ingrediente económico en el mundo y nuestro país es tanto o más angustioso que el mismo impacto de este coronavirus. 

Para enmarcarlo, en el patio, el primer impacto (a todo previsible) fue el bajón en la recaudación de impuestos, en marzo; de acuerdo a una información de La Estrella de Panamá, del 4 de abril de este año, tuvo un registro del 42..8% por debajo. El objetivo planeado era recaudar  $719.9 millones; la realidad fue de $411.9 millones; eso da un faltante de $308 millones.


Vamos a alejarnos del tecnicismo e ir directo a los ojos u oídos de la persona de a pie y saber ¿cómo nos pueden afectar estos números?; mucho, porque pone en riesgo los grandes proyectos que se tenían planeados y que van en la generación de mano de obra; lo otro, en la ayuda a obras sociales de las personas más vulnerables e importante los ajustes que se habían planeado a profesionales y que deben ser evaluados, ante la crisis que afrontamos.

El primer semestre no creo sea muy halagador para el Estado en función de sus recaudaciones y obvio que se tendrán que hacer ajustes al Presupuesto planeado y el próximo año tendrá que ser moderado sin dejar de ser ambicioso en tema de recuperación económica.

El gobierno hasta ahora ha dicho que tienen un par de medidas y ha focalizado en arrancar con impulso el sector construcción, entre eso la continuidad de la línea 3 del Metro; sugiero meterle la mano a las Asociaciones Públicos Privadas para mancomunar esfuerzos.


Este lunes, 20 de abril, el gobierno nacional, anunció el cierre por 30 días más la salida y entrada de vuelos a nuestro principal Aeropuerto. Para una nación, con una posición geográfica, y que en los últimos años se nos ha llamado: El Hub de las Américas, estar parados otro mes no es alentador.

Este mismo día escuchaba al industrial Aldo Mangravita, en Radio Panamá, molesto porque el país está detenido económicamente y aunque comprendo su fondo; su forma no es la justa ni la más acertada.

Estoy de acuerdo, en una parte de su planteamiento, debemos iniciar exploraciones ¿qué ventanas comerciales abrir?; una puede ser las compras por internet; permitir que negocios que venden mercancías de hogar, electricidad y autos abran un par de horas; eso sí asegurando la protección de los colaboradores. Lo mismo, en la Industria; todo dentro de los protocolos de bioseguridad necesarios.


La desocupación que estaba por el orden del 4.5% de seguro va a subir con esta crisis sanitaria y económica. La Organización Internacional de Trabajo (OIT) habla de la posible pérdida de 25 millones de empleos; en uno de sus últimos informes establece que el recorte de horas hará desaparecer 6.7% de horas-colaborador, lo que se traduce en 195 millones de trabajadores de tiempo completo.


La gran interrogante que todos nos hacemos o al menos los que nos inquieta una explosión social es: ¿Cuándo bajamos la bandera para el regreso al trabajo?

La respuesta no es simple y no la es, porque un mal movimiento es si atacamos al enemigo de frente y descuidamos la retaguardia y los flancos derecho o izquierdo. Perdemos la batalla. Una mala decisión le puede costar al país no inversión de capital, sino vidas humanas que, en este momento, suman ciento y algo.


El sector primario parece tener uno de las respuestas, no la desechemos; la madre tierra nos bendijo muy bien y debemos aprovecharla; el Canal de Panamá debe convertirse ahora más que nunca en una respuesta aunque eso signifique bajar el peaje y el no cobro de uso de agua.

Esto es como el arte de la guerra si están cayendo hombres se toca la retirada y nos agrupamos, pero este agruparnos se traduce en sentarnos con todos y hacer un gran compromiso nacional para salir adelante. ¡Qué suena utópico!!!.. nunca antes los soñadores tuvieron su mejor momento.

jueves, 16 de abril de 2020

ECONOMÍA: LO QUE VIENE DESPUÉS DE COVID-19


He querido iniciar este escrito, con la posición de los principales Organismos Internacionales Financieros; la posición de Centro de Estudios Latinoamericano y la visión del Papa Francisco, esta desde un punto de vista humanista, sobre la otra cara del Coronavirus. 
Muchos han denominado esta etapa la PostPandemia, otros más afines al cine le han llamado El día después de mañana; el nombre da igual, lo real es que cuando se controle este patógeno vendrá la revisión de los caídos, los que suman más de 100 mil, y la otra parte será los daños colaterales donde la Economía es el plato principal.
A inicios del mes de marzo, recuerdo, varios economistas y estudiosos de estos temas macroeconómicos comparaban las secuelas del COVID-19 con la recesión del 2008 y 2009; pasado menos de un mes la incertidumbre nos ha llevado más lejos y si bien para unos es única; otros la ven similar a la Gran Depresión de 1930.

En un silogismo rápido, estamos ante 102 años de la última Pandemia: La Gripe Española y a 90 años del momento más desastroso de la Economía Mundial.
Lo confieso me inquietaba el panorama económico antes de la aparición de este patógeno, porque sentía falta de visión y cálculo de quienes jalan los hilos del Poder Económico.
Nuestros empresarios, tal vez, por ese Capitalismo Salvaje, del que habla el mismo Papa Francisco y hasta los más conservadores, no han medido hacia dónde empujar la carreta. Sólo ven el dinero por encima de la gente y cuando olvidamos eso podemos estar en la fabricación de un estallido social incontrolable.
Del otro lado de la soga, los Dirigentes Sindicales que sólo piensan en sus intereses sin medir que hasta ellos, en ese estallido social, pueden ser arrasados.
Hay que ver la Tecnología como aliada 
El desarrollo tecnológico había iniciado una Purga espontánea de un grupo de trabajadores que no tienen manera de insertarse en las nuevas formas de empleo. Un ejemplo claro es la construcción: ¿Qué va a pasar cuando ese hombre que mezcla o pega bloque no sea necesario para las nuevas tendencias de construcción?

Eso inquieta, porque tiene tres caminos si no los preparan: El primero, ser presa fácil del delito común, ser mano de obra del Crimen Organizado o  ser parte de los subsidios Estatales. En los dos primeros casos nos va a afectar todos por igual.
Con el COVID-19 esto ha echado adelante el carro del desarrollo en forma acelerada.
Nada...pero, nada volverá a ser como antes; si algunos empresarios creen que sus viejas prácticas van a continuar les tengo una mala noticia: Ni el mismisímo Henry Kissinger lo ve así; no hay nadie con algo de alma que no confiese que el MODELO ECONOMICO se agotó y la pregunta es ¿por qué se agotó?, eso es para otro escrito.
Muchos han acudido que si al New Deal (El nuevo trato) del Presidente Franklín Delano Roosevelt, para superar la Gran Depresión, 1930-1932, o, el Plan Marshall, más conocido como European Recovery Program; Plan de los Estados Unidos de América terminada la II Guerra Mundial, pueden tener la respuesta. 
Creo que es importante mirar la Historia, pero, estimo (sin ser un especialista, sólo un Periodista adicto a los temas económicos) que los momentos ni son los mismos y si bien fueron dos pruebas de fuego; los escenarios actuales son distintos y la realidad es que la desaceleración era un tema en discusión y mi pregunta inocente ¿a qué pared nos vamos a recostar?.

Entonces, los panameños ¿cómo haremos?; hay que consultar a los Expertos, esos que se atreven a hacer pronósticos sin deshumanizarse o sin esperar que los patronos le den la línea,
Mi sentido común me dice que Gobierno, Empresa Privada, Sindicatos, Gremios, miembros de Partidos Políticos deben sentarse en una mesa, incluso con cobertura abierta para que nadie tenga debajo de la manga su menú particular. Si eso no lo hacemos el rumbo puede ser incierto porque esto va por lo largo; de no hacerse así el costo que podemos pagar puede ser tan nefasto como el mismo Patógeno COVID-19.

lunes, 6 de abril de 2020

LOS NUEVOS HÁBITOS QUE NOS DEJARÁ EL COVID-19

Cambiar de hábitos es uno de los grandes retos que tenemos los seres humanos por delante; un hábito determinado se establece desde que nacemos o a lo largo de nuestras vidas, por repeticiones, con raciocinio o no; los podemos observar cuando conversamos o reaccionamos en forma diaria. Es la respuesta inmediata que tenemos todos, a manera de una plantilla establecida, ante el mínimo estímulo.
Siempre hay tiempo para nuevos aprendizajes
Entre los descubrimientos, hechos por la Ciencia, está que los ganglios basales, ubicados cercano al encéfalo y debajo de la corteza cerebral, son los responsables del aprendizaje y la desconexión de los hábitos.
Hace aproximadamente 8 años, cayó, a mis manos, gracias al aporte de un jefe, el libro El Poder de los Hábitos, Charles Duhigg, y completé algo que el instinto periodístico me decía: Nuestros Hábitos nos definen y si hacemos una exploración científica vamos a encontrar, en todos los continentes, personas con reacciones igualmente aprendidas aunque no se conozcan ni tengan vinculación sanguínea.
Hablo de los hábitos, porque con el Coronavirus (COVID-19), surgieron nuevos modelos para nuestra convivencia diaria y otros que seguirán, porque cambiar es lo único que prevalece.
En la historia de la humanidad hemos tenido desafíos que nos han obligado a variar nuestros hábitos, nada fácil. Ahora con la neurociencia podemos comprender mejor el comportamiento humano, lo difícil de cambiar nuestros hábitos y cómo podemos modificarlos cuando detrás tenemos una recompensa.
Durante la mal llamada Peste Negra, ocurrida en dos etapas entre el 1,347 y 1353, la gran enseñanza adquirida fue la aplicación de la Cuarentena, una medida que hoy sigue vigente; otro elemento agregado fue la máscara (antecesora de la mascarilla) con pico de pájaro (que hemos visto en muchas películas y se usa en Venecia hoy día); los médicos la utilizaban para no tener contacto con los pacientes; otro fenómeno que apareció tras terminar la Peste Negra fue la migración de los campesinos hacia las zonas desarrolladas; el salario mejoró y surgió la “clase media”, hoy sector medio.
Durante la Peste Negra apareció la cuarentena
Durante la Gripe Española (1918), ocurrida hace 102 años, igualmente se adquirieron nuevos hábitos. Tres fueron los más importantes y que han persistido: “1) La vigilancia continúa ante cualquier brote; 2) Las Campañas Públicas de Salud hacen la diferencia y 3) La demografía de la población es un punto a considerar”.
Luego, de todo esto llegamos al COVID-19 y son varias las lecciones que de seguro nos va a dejar; la cuarentena sigue como un punto importante para frenar el avance de cualesquiera virus; entre los hispanos, más los caribeños, entre los que nos sumamos los panameños; de seguro vamos a 
modificar nuestras muestras de cariño (confieso, en lo personal en ocasiones me es invasivo, soy mal latino); la forma de compras de seguro variará; en el campo educativo el reto es enorme para adaptar nuestro sistema público ante la nueva tecnología (hace años eso era una demanda)  hoy, es una necesidad; en la educación privada los padres aprenderán a exigir; la tecnología debe estar al servicio de las personas y no al revés; la relación de las familias se debe fortalecer; el modelo de trabajo se tendrá que replantear; mayor protección del medio ambiente y cada vez siento más que el modelo económico, a nivel mundial, se agotó y nos abriremos ante nuevos esquemas.
La paella se originó ante una necesidad
Si en la Segunda Guerra Mundial los ciudadanos de Estados Unidos de América aprendieron a comer vísceras para que la tropa, en el frente, estuviera mejor alimentada; la Paella surgió, entre los siglos XV y XVI, por una necesidad de comer los campesinos españoles algo rápido; sin duda, los Panameños vamos, tras la Pandemia del Coronavirus, a cambiar y adquirir nuevos hábitos; porque de eso se trata la vida: Renovarse ante la adversidad y se resilientes ante los nuevos tiempos,

miércoles, 1 de abril de 2020

LA CARRERA DE LA CIENCIA CONTRA EL COVID-19

Una vez se conoció la expansión, casi descontrolada, del Coronavirus (COVID-19), en el mes de Enero, en la China, la ciencia empezó a buscar respuesta para un virus del que desconocían muchos detalles (hoy, algunas dudas despejadas), pero que genera enfermos,  mútiples contagios y hasta la muerte.
Más de 300 experimentos hay en este momento contra el COVID-19
Los científicos chinos fueron los primeros en intentar crear medicamentos o combinaciones de fármacos conocidos para tratar de minimizar los daños a los pulmones y a otros sistemas que son afectados, en ocasiones, cuando el virus entra al organismo.
En el caso de China, la vacuna se va a experimentar en 108 personas, todas ellas de la ciudad de Wuham, epicentro donde nació el virus y que, hoy,  tiene cercado al mundo.
  En la ciudad de Wuham, China, inició la prueba
de la vacuna  para el COVID-19
Recordemos que este virus entra  a nuestro organismo por la boca o las fosas nasales y de allí va al recto por ello en algunos casos, de acuerdo a los trabajadores de salud y científicos, ocasiona diarrea y otros problemas paralelos.
La batalla por encontrar la vacuna que pueda darle una respuesta a esta pandemia se ha convertido en la gran lucha de la gente de ciencia (hombres y mujeres/ mujeres u hombres) para reducir este microorganismo que al mundo entero lo tiene aislado y de rodillas.
En Inglaterra, la Universidad de Oxford, una vez tuvo la luz verde, con el dinero, arrancó con el experimento de hallar sino la cura, el freno para la expansión de este enemigo invisible.
Hasta ahora se contabilizan más de 30 proyectos de investigación para encontrar la fórmula correcta; incluso por primera vez, algunos de estos experimentos se han iniciado en seres humanos antes que animales
Ya antes la humanidad ha estado entre la espada y la pared, cuando apareció la influenza H1N1, el brote de ébola, y otros virus; sin embargo, a meses de ponerse en prueba la vacuna para algunas de estas patologías la efectividad del virus había 
descendido y, en algunos casos, hasta desaparecido.
Nuestro país no se ha quedado atrás (Panamá) y hace escasas dos semanas 4 científicos del Instituto Gorgas (en honor William Crawford Gorgas), lograron aislar varias cepas del Coronavirus. Un paso gigantesco para identificar un camino para combartilo.
La otra parte, es que la ciencia intenta darle respuesta a una población que pide una respuesta, sin embargo, para ser francos, y que los no científicos pisemos la tierra, una vacuna contra el COVID19 no estará disponible al menos antes de 6 meses o más.
Lo siguiente es ver sobre el terreno la efectividad real de este remedio, en la población, que es muy probable esté aún en una lucha contra el COVID-19.
Por el momento, las grandes casas farmacéuticas tienen un gran pulseo por ser los primeros en contar con el fármaco o la vacuna para un virus que hasta este momento ha matado 46 mil personas y casi un millón son los contagiados. Hoy, en Estados Unidos, una científica, ha pronosticado moderamente se darán más de 200 mil muertos.

domingo, 29 de marzo de 2020

EL COVID-19 ES EL LLAMADO A CUIDAR EL PLANETA

"Nos estamos enfrentando a la sexta extinción masiva 
y el ritmo de extinción es 10.000 veces más rápido de lo normal"
 Greta Thunberg

Me declaró creyente de la cultura verde, de la conservación de nuestra tierra; como nuestros antepasados, y por una razón simple:  Nosotros dejaremos este espacio y quienes vengan recibirán una tierra cansada y con recursos agotados; entonces la guerra dejará de ser por la tierra,  será por la sobrevivencia de esos recursos que no son infinitos.
Hace años, tuve la oportunidad de leer un excelente trabajo científico, publicado por la revista Newsweek (la que debe estar en algún rincón), y en ella un científico intentaba explicar, con una hipótesis, cómo llegó el VIH a los humanos; y su explicación se basaba en la convivencia de humanos con un determinado mono.
Hoy, casi 20 años después, me tropiezo con este artículo publicado por el diario El País, de la periodista Patricia Peiró: https://elpais.com/elpais/2020/03/23/planeta_futuro/1584966075_762387.html y en pocas palabras es lo mismo: investigaciones demuestran que hay cerca de mil 700 virus y otros que desconocemos aún;  el coronavirus es uno de ellos. Al final, los resultados son los mismos; si continuamos con las prácticas de mezclar, en un mismo punto, animales diversos los resultados pueden ser catastróficos.
foto tomada de El País 

“La deforestación está directamente relacionada
con el 31% de los brotes—. Si miramos estos detonantes”

Esta posición tiene lógica y hasta evidencias tangibles, en este momento en que somos asediados por el COVID-19; sucede que en China, ante la disminución de autos y viajes mostró un cambio gradual en el nivel de contaminación ambiental.
Italia, la nación que tristemente por la falta de atender las alertas tiene la mayor cantidad de fallecidos por este virus, hoy, varios reportes informativos indican que los canales de Venecia se han limpiado y se han observado hasta peces.
Realidad de Venecia hoy
Todo esto nos debe llevar a pensar y evaluar ¿qué hacemos mal?;  son pocas voces, sobre todo las científicas y los ambientalistas, no snobistas (ellos surgen cuando los demás aprietan el botón “ON”)  nos revelan, no leyendo oráculos, sino bajo premisas de cifras e investigaciones,  que nuestra tierra la hemos flagelado y el COVID-19 parece ser sólo la pequeña muestra del iceberg al que nos enfrentamos de no parar un desarrollo inhumano.


¿Estamos a tiempo de hacer un cambio? ¿puede haber un desarrollo sin agotar nuestros recursos naturales?; esas y otras preguntas tiene un contundente; genera más concienciación, por supuesto, y nuestro país es un ejemplo de ese agotamiento. 
El conocido Tapón de Darién, nuestros ríos y recientemente parte de nuestra área revertida, entre muchas otras, han sido víctimas de poner el urbanismo descontrolado por delante.
El COVID-19 nos ha costado vidas y nos cobrará aún más; desalentará la economía; lo que como aprendizaje nos deja son variadas lecciones y una de ellas es que, como los seres humanos, cuando nos intoxicamos, la Madre Tierra, decidió expulsar parte de lo que ha recibido y sanarse; no esperemos que su limpieza equilibrada sea mayor.

domingo, 22 de marzo de 2020

ABRAZOS Y CONVERSACIONES EN TIEMPOS DEL COVID-19

A medida que el Coronavirus avanza en los países una medida es, hasta ahora el remedio, para mitigarlo; se trata del aislamiento de las personas, sobre todo los adultos mayores. Quedarse en Casa no es un hashtag más; es la marcha de retirada para evitar la propagación de este virus.
El aislamiento es la mayor medida contra el coronavirus
Hoy,  el avance de la medicina junto a la tecnología, ha permitido un conocimiento más rápido del COVID-19 (nombre del coronavirus), sin embargo, por más noticias que alientan a la humanidad de fármacos, vacunas y remedios, nada está demostrado y pudiera demorar, al menos un año, una confirmación de su efectividad.
En pleno siglo XXI, cuando muchos se creían infalibles y lo tenían todo controlado, un virus que se esparce a través del contacto humano nos ha reducido y nos ha obligado a encuartelarnos para luchar contra él.
El COVID-19, familia de un grupo de virus transmitido por los animales en su mayoría, nos ha obligado a hacer cambios en nuestros hábitos diarios; especialmente a los latinos, dados a los abrazos, besos, apretones de manos y toda muestra cálida de cariño.
En una lectura hecha, los sociólogos han definido este fenómeno como la microsociología de los saludos, eso quiere decir que lo cotidiano, el diario vivir al que estábamos acostumbrados como son: Saludos, abrazos, besos y demás, ahora no son positivas y hasta nos puede transmitir el virus. Debemos estar a un metro distancia y, como escuché, al doctor, Elmer Huerta, en Radio Panamá, “aislarse” y “evitar conversar” es una solución para impedir los contagios.

Frente a ello que ha sucedido, en países como Italia (donde la cifras de muertos va por los 5 mil), y los contagiados suman más de los 60 mil); España ( las muertes suman cerca de las mil 730 personas y los contagiados pudieran ser 30 mil), ante la falta de atención y el llamado de las autoridades, se han visto obligados a cerrar las puertas de sus casas y no salir.  La cuarentena ahora es obligada.
Los adultos mayores en Italia son los principales víctimas
Este es un virus nos ha aislado socialmente y nos ha obligado a pensar y revaluar nuestras vidas; estar en cuarentena ha sido lo más duro vivido para personas que quedaron solas. 
Es Tiempo para que la familia esté junta; para valorar nuestro hogar; reaprender lo básico.
Hoy, aquello “pasado de moda”; lo que la tecnología, a través de las redes sociales, nos había arrebatado resulta importante: Volver a la sala el televisor (puede ser para ver canales abiertos, cables o formatos nuevos en streaming); el dinero deja de tener el valor de que todo se compra; al final, el coronavirus no discrimina y a todos nos puede dar; algo que, en lo personal, me impresiona hemos girado el rostro para escuchar.
Sólo en España la gripe española cobró 260 mil personas
Cuando pase el Covid-19, como lo hizo la epidemia de la Gripe Española, la Peste Negra, de seguro nuestra conducta (tal vez no generalizada) habrá cambiado; incluso, nuestro consumo variará y antes de dar un abrazo frívolo optaremos por un gesto sencillo con un valor real.
Ni a los mejores escritores de cine ni de novelas se hubieran imaginado un mundo con sus fronteras cerradas; con su economía contra las cuerdas; con calles silenciadas y la preocupación de cómo volveremos a la normalidad.

domingo, 15 de marzo de 2020

LA REBELIÓN DE LOS IDIOTAS

El coronavirus lleva su nombre por las coronas que tiene el virus


Lo primero, pido disculpa por este título, porque para todos es un término duro y hasta despectivo; más no es así. Idiota proviene del griego "idiotes" y se refería al hombre que no "se ocupaba de los asuntos públicos, sino sólo de sus interes particulares".

Dicho esto, hace 90 años, el filósofo español José Ortega y Gasset, escribió su libro que lo hizo trascender: La Rebelión de las Masas, coincidentalmente Ortega y Gasset se refería al hombre pequeño (de pensamiento) y que se unía a un colectivo gregario y actuaba en función de una tribu, que no piensa si es o no lo que necesita un sociedad, un país o un continente.
Hoy, el mundo está ante la aparición del conocido “Coronavirus” o Covid-19, familia de unos siete coronavirus, dos de los cuales ya han generado contagiados y muertes, en el pasado; la diferencia está en que hemos sido presa, en medio del combate por parte de los gobiernos, de quienes usan las redes de forma irresponsable y generando el caos con informaciones falsas y que no ayudan en nada. Se replican hasta fórmulas mágicas para curarlo. Eso no es serio ni humano.
En el caso nuestro, el virus, hizo su entrada el pasado 9 de Marzo, dar cifras en el momento de escribir este blog no vale, porque las cifras deben ir en crecimiento, tal como se ha comportado en otros países; desde ese mismo momento inició todo tipo de datos, unos más exagerados que el otro y la reacción vino en cadena.
Los supermercados se abarrotaron, las farmacias tuvieron el mismo comportamiento y los artículos fueron en escalada ascendente por parte de empresarios inescrupulosos, inescrupulosos, no hay otra palabra, que aprovechan lo mínimo para llenar sus cuentas de ahorros sin medir nada; ni siquiera su propia seguridad.
Los comercios de comida y farmacias fueron inundadas
Los casos, como era predecible por el comportamiento del virus, han empezado a elevarse y nuestro servicio de salud ha tomado las medidas similares a otros países: Suspensión de clases a nivel nacional, reducción de los colaboradores, en el sector del Estado, sugerencia hecha igual para la empresa privada.
Las medidas sanitarias han ido en aumento; no más de 100 personas en un mismo sitio; la suspensión de actividades recreativas, religiosas y en fin, todo lo que inpida que el virus, con los contagiados locales se multiplique como ha sucedido en naciones como Italia o España. Recordemos que el virus necesita menos de un metro para ingresar en nuestro cuerpo.

Todo esto suena bien; donde la puerca tuerce el rabo es que algunos inmaduros, o masas, o la rebelión de los necios, como los llama Umberto Eco, han tomado la decisión de moverse hacia el interior; de seguir como si aquí no pasara nada; por lo que las autoridades van a tener que tomar el toro por los cachos.
En redes y whatsapp aunque las informaciones falsas (fake news) han disminuido persisten los “necios”, por no decir idiotas, sin medir que su propia familia pudiese ser presa del coronavirus.  Incluso, existen periodistas con preguntas, ante el Informe diario de los casos por parte del MINSA, que preguntan como buscando que les digan hay 100 muertos; 500 contagiados.
Esto es serio y, hoy, el Periodismo debe crecerse y dejar de manipular como político electorero; ya habrá tiempo para señalar; pero, en verdad, este no es el momento. Hoy, si no actuamos juntos, si no asumimos, nos guste o no, las medidas del gobierno, no nos irá bien. Italia y España son espejos donde no nos queremos ver; hagamos como Corea del Sur que asumió un liderazgo y mitigó el avance del coronavirus.
Lo importante es que como comunicadores reflexionemos que este es un tema de Seguridad Nacional y el rejuego de títulos tendenciosos no son positivos.

La inversión que nos genera investigar

" La verdad se robustece con la investigación y la dilación; la falsedad, con el apresuramiento y la incertidumbre.” Tácito  C reo en l...